INTRODUCCIÓN GENERAL AL CURSO
Esta materia ha sido concebida como un espacio de reflexión, análisis y discusión acerca de algunos de los temas eje que estructuran la filosofía política. Vamos a leer, comentar, refutar y debatir el pensamiento de los filósofos más representativos del pensamiento político clásico, moderno e ilustrado. Y haremos algo más, vamos a confrontar estos importantes varones de la filosofía con las lecturas hechas por filósofas política feministas contemporáneas. Esta labor de contrapunto tendrá su cierre con la lectura del texto de Carol Pateman, El contrato sexual. Esta filósofa contemporánea saca a la luz los presupuestos patriarcales del modelo contractualista moderno e ilustrado de legitimación del orden civil.
El pensamiento político se desarrolla paralelamente a la vida política. La filosofía política surge en el contexto de la vida política de Grecia. Se considera tradicionalmente a Sócrates (469-399, a.C.) el iniciador de esta disciplina. Es usual establecer una distinción clara entre lo que se conoce como filosofía política clásica que, desde Sócrates, Platón y Aristóteles alcanza hasta el siglo XV, (pasando por el periodo del Medievo), y la filosofía moderna e ilustrada propia de los siglos XVI al XVIII. En este curso, trabajaremos además de a los clásicos (Platón y Aristóteles), el desarrollo del contractualismo moderno e ilustrado y el concepto hegeliano de Estado. Para ello, vamos a rastrear una serie de problemas que se han venido trabajando a lo largo de este periodo. Entre otros, los siguientes:
- La naturaleza de la sociedad humana, ¿a qué debe su origen? ¿es natural o artificial? ¿cómo se mantiene unida? ¿qué genera los conflictos al interior de la comunidad? A lo largo del curso tendremos la posibilidad de distinguir entre la polis, sociedad humana que los filósofos clásicos consideraron más perfecta, (se le conoce como ciudad-Estado) y el Estado. Los clásicos carecían del concepto de Estado. Veremos como hoy se distingue entre el Estado y la sociedad civil. Platón, Sócrates y Aristóteles no establecían esta distinción, en aquel momento histórico no se requería. Para Hegel fue fundamental. Analizaremos a los filósofos que a partir del siglo XV buscaron encontrar una justificación para la existencia y establecimiento de un cierto orden de la comunidad política, a este orden, se le identificó con el Estado.
- Desde el inicio de las reflexiones sobre la comunidad se planteó, como señalé arriba, el asunto de si lo político, la cosa política, era natural o fruto de la convención, del acuerdo. ¿Qué implicaciones tiene este problema? Una de ellas tiene que ver con el ejercicio del poder político. La cuestión es determinar quién tiene autoridad y por qué. Esta cuestión está vinculada con otras, por ejemplo, el papel de las leyes en el ejercicio del poder político; así, nos preguntamos desde Platón, ¿por qué obedecemos la ley? ¿Es la ley natural o fruto de convenciones?
- Una vez determinadas estas cuestiones, surge otras preguntas acerca de la validez o pertinencia de las diferentes formas de gobierno. ¿Hay diferentes formar de establecer un gobierno? ¿cuáles son mejores y por qué? Desde Aristóteles quedaron establecidas ciertas características de las diferentes formas de gobierno que aún se discuten y afinan. Discutiremos estas formas de gobierno.
- Desde el inicio de la filosofía política se planteó el problema de la ciudadanía. ¿Quiénes son los miembros de la comunidad política? ¿Quiénes quedan fuera o son excluido o excluidas? ¿A qué criterios obedece esta exclusión? ¿Qué formas de opresión se esconden tras esta exclusión?
- Un tema central para este curso será revisar el origen y fundamento del Estado. Para ello, vamos a conocer, analizar y discutir los supuestos que permitieron la emergencia de un modelo político conocido como contractualismo que ha permitido hasta la fecha legitimar un cierto orden civil. Analizaremos y criticaremos también la definición, caracterización y justificación que Hegel hizo del Estado en el siglo XIX.
Este curso tiene una orientación histórica porque pensamos que las preguntas que guiaron la reflexión de los filósofos del pasado siguen aún vigentes en nuestra propia sociedad. No tanto porque las sociedades sean las mismas sino debido a que alguno de los problemas que se les plantaban aún permanecen. La perspectiva de género nos permitirá comprobar hasta qué punto los modelos políticos ideados para justificar el orden civil han servido para la exclusión y subordinación de la mitad de los seres humanos: las mujeres.